¿Y tu que clase de madre eres? de Paula Daly

Paula Daly consigue con su novela crear suspense entre lo más cotidiano. Es siempre un recurso que me gusta en un libro. Tan complicado veo, crear un mundo completo como Canción de Hielo y Fuego como la desbordante imaginación de Stephen King que le da, para de forma magistral, desarrollar un relato de terror en medio de un pueblo tranquilo y aburrido.
¿Y tu que clase de madre eres? es un libro entretenido, te mete el desasosiego en el cuerpo no con asesinatos rituales ni historias. Lo hace apelando a lo más presente que tienes eres una vez eres padre o madre: que a tu hijo le pase algo por tu culpa.
Yo me he sorprendido en ocasiones, muchas para mi salud mental, repasando alguna caída de mi hijo o algún incidente y añadiéndole, y si se hubiera...? Pues con este miedo juega la escritora y le ha quedado un relato bastante aceptable.
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Sinopsis del libro
  Dónde está la joven Lucinda? Esta es la escalofriante pregunta que planea sobre los habitantes de Troutbeck, un idílico pueblo inglés enclavado en el distrito de los Lagos. La historia comienza cuando Lisa Kallisto, madre trabajadora de tres hijos, descubre horrorizada que Lucinda, amiga de su hija adolescente, ha desaparecido estando a su cargo. Lucinda es la hija de Kate, amiga íntima de Lisa y madre modélica, a quien Lisa no puede evitar querer y envidiar a partes iguales. Cuando Lucinda desaparece, Lisa decide ayudar en la búsqueda, colaborando con la magnífica agente de policía Joanne Aspinall, que investiga varios casos de desapariciones en la zona.
¿Y tú qué clase de madre eres?se ha convertido en uno de los thrillers más comentados del año, puesto que no solo es una historia que deja al lector sin aliento, sino que además aborda una cuestión de plena actualidad: cómo manejarnos en el día a día con millones de cosas en la cabeza, cuánto sacrificamos por atender tareas laborales y familiares y cuál es el coste emocional de todo ello. Fuente Casa del libro. 

Imagen Casa del Libro 

Paula Daly fuente quientelohacontado. com

  Mi impresión

Lisa Kallisto, una madre con tres hijos, casada y con un trabajo en una protectora de animales, siente que no le alcanza la memoria ni el tiempo para llegar a todo. Hasta aquí, lo usual en muchas mujeres.

Pero  ya no lo es tanto cuando  su mejor amiga, Kate,   le dice que su hija se va a quedar  en su casa a dormir y lo olvide. Podría haber quedado como algo en el anecdotario de despistes de Lisa, pero la niña desaparece.

Ya tenemos un drama y de los gordos, servido. La pobre mujer no sabe donde meterse, al horror de la desaparición de la joven de trece años se une, el sentimiento de culpa.

Cuando la madre Kate , le pide que le traiga a su hija, ella no duda en prometérselo...
La policía de judicial, Joanne Aspinall , recibe el aviso del caso de la desaparición de Lucinda con resignación. Hace poco,  secuestraron a una chica que apareció al día siguiente con signos de violación y sin acordarse de casi nada. La habían drogado. Parece claro que hay un sujeto que rapta a chicas pero la policía también quiere conocer el entorno de Lucinda e inicia lo interrogatorios de rigor.

 Hablará con los padres, con Lisa, los compañeros de colegio... No parece haber nada destacado en lo que unos y otros cuentan, hasta que Lisa Callisto , se pone en contacto con ella para manifestar que , Sally, su hija, les ha ocultado una información clave :la chica se veía con un hombre mayor que ella. Por otro lado Lisa está conmocionada ante la revelación de su hija. La niña no quería contarlo por no traicionar a su amiga Lucinda.

La narración completa del libro abarca de martes a viernes, cuatro días dónde asistiremos a las pesquisas de la policía por encontrar a la chica, el día a día de Lisa asistiendo incrédula a lo que va a ir conociendo de la intimidad de su amiga.

Joanne no va a tener fácil su tarea, desaparece una chica más sin que aparezca la anterior.
¿Y tu que clase de madre eres? Es una lectura sencilla, con algo de relleno innecesario para la trama pero no llega a sumirnos   en el aburrimiento total. Lo que más destaco es que si bien la mitad del libro es más previsible, luego se va enredando , para cerrar con un final honesto.