miércoles, 21 de noviembre de 2018

Anatomía de un Escándalo de Sarah Vaughan

Anatomía de un Escándalo es un guisote de digestión dura . Espeluznante. Iba a ser una  lectura de transición. El motivo,  dos libros intensos.
 El Dios de nuestro Siglo supuso una lectura más atenta con una trama y ambiente lúgubre. Después  Sirenas , otra novela truculenta que me costó acabar. 
La novela de Sarah Vaughan siembra un germen al que das una oportunidad para luego ver como la autora,  lo aniquila de un rafagazo de herbicida.

Sinopsis del libro

El marido de Sophie, James, es un padre amoroso, un hombre apuesto, una figura publica carismatica y exitosa. Y sin embargo, se le acusa de un terrible crimen.


Fuente : Amazon 

Sophie esta convencida de su inocencia y esta desesperada por proteger a su preciosa familia de las mentiras que amenazan con separarla. Kate es la abogada contratada para llevar el caso: una profesional experimentada que sabe que solo se puede ganar el caso a traves de una buena argumentacion. Pero Kate busca la verdad en todo momento.
Sarah Vaughan 
Esta segura que James es culpable y que esta decidido a pagar por sus crimenes. Quien tiene razon acerca de James? Sophie o Kate?

Mi impresión

Cuando recae en la abogada  Kate Woodcroft demostrar un delito  de violacion cometido por un importante  político , esta se empleará a fondo. Pese a la buena imagen que tiene James Whitehouse  como funcionario público y hombre centrado en su familia  ; Kate tiene sólidas razones a exponer y conseguir un veredicto de culpabilidad.

Tribunal Penal Central de Londres y Gales
 Pero es consciente de lo difícil que es demostrar este tipo de delito. . Y es que el acusado no niega que el acto sexual ocurrió, pero mantiene que fue consentido por ambas partes. 
La otra cara de la moneda es la mujer del acusado, Sophie. Ella está desbordada por el  escándalo .


Sala del Tribunal Central 
Con el juicio se entera que su marido le era infiel con su ayudante, escuchará a la vez que  todos los asistentes, los detalles más escabrosos  de sus prácticas amatorias y que todo un país, asista atento al espectáculo público de su humillación y la de su " perfecta" familia . 
Y lo peor,  es que Sophie reconoce a su marido en cierto modo. 
Cuando James y ella se conocieron, eran estudiantes de la universidad de Oxford y allí James participó de unos sucesos que de conocerse en el tiempo presente, le supondría una condena inmediata. 

Biblioteca de la Universidad de Oxford 
El ansia de Kate por demostrar la culpabilidad del famoso político y la desesperación de Sophie por todo el problema que se le ha venido encima, articulan la trama. 
Podia haber sido un libro entretenido si no fuera porque la autora carece de cualquier tipo de pericia para sacar la trama adelante.  Los escollos que ella misma plantea los soluciona de dos patadas. 
Aquí un momento muy ilustrativo. En la progresión de la trama,  hay idas y venidas del pasado al presente de los protagonistas. Se descubre así que Kate, ya conocía al acusado y a la esposa. De saberse quedaría invalidada como fiscal.

Abogada londinense con la característica toga y peluca 
 Aún así,  acepta el caso segura de que no será reconocida. Físicamente, ha cambiado mucho. Lleva otro peinado y ha perdido peso... 
De los protagonistas tampoco se puede esperar que cambie mi opinión sobre Anatomía de un Escándalo. La  construcción de los personajes principales es una sucesión de clichés. 
 La fiscal es una persona fría y resentida. Porque ¿ si es una mujer cercana o muestra algún rasgo de emotividad ya está invalidada para ejercer la Abogacía?  
Sería  por blanda, supongo.  La otra mujer del reparto no sale mejor parada, casi peor si me preguntan a mi. 



 Sophie en su etapa de estudiante,  sus aspiraciones eran salir de fiesta, hacer contactos. Un aprobado raspado y asegurarse un futuro marido. En ese momento aparece James. 
Adinerado, snob, clasista y al que le espera, por su origen, un brillante futuro profesional .


Parlamento de Londres 
Ya en el presente nos encontramos que la pareja, efectivamente son marido y mujer.  Mientras él ha escalado hasta un importante cargo en el gobierno, Sophie ha dejado su trabajo por petición del marido.

Cámara de Los Lores
James  quiere a su esposa en casa, cuidando de sus hijos y ejerciendo de Mujer De.

 Todo muy acorde pero para los años 40. 
El libro ya llega al final entre trompicones. No mejora la factura de la historia, es más, empeora. La autora no cuenta a éstas alturas con margen de maniobra, y lo salda con un tiro de gracia que acaba,  de una vez con el folletín.



3 comentarios:

  1. Ufffg pues ni tocarlo con un palo. Cómo me gustó El dios de nuestro siglo. Estupenda reseña.
    Besitos

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. Pues si Martina el libro es un verdadero truño y lo peor la prensa especializada babeando, poniendo a la autora por las nubes. Te gustó entonces El Dios de nuestro Siglo. Es un libro muy, muy original. ¡ Y vaya forma de escribir del autor! Que cultura tan extensísima... Gracias por tu comentario.

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